Cardenal de Jerusalén se ofrece como moneda de cambio a Hamás

El cardenal de Jerusalén se ha ofrecido al grupo extremista Hamas a cambio de la liberación de los niños israelíes secuestrados que se encuentra en Gaza.

Se calcula que una docena de niños israelíes fueron secuestrados en Israel el pasado 7 de octubre por Hamas, una situación que preocupa sobremanera a la comunidad internacional, luego de que el grupo extremista amagara con asesinar a los rehenes si Israel no deja de bombardear la Franja de Gaza.

Ante esta situación, no solamente el secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin, ha manifestado la voluntad de la Santa Sede a “cualquier mediación necesaria”, sino que ahora el Patriarca Latino de Jerusalén, cardenal Pierbattista Pizzaballa, se ha ofrecido como ‘moneda de cambio’ por los niños israelíes secuestrados.

El arzobispo católico italiano, hablar de las posibles soluciones al conflicto bélico entre Israel y Hamas, dijo a un grupo de periodistas:

“Estoy dispuesto a un intercambio. Cualquier cosa para traer a los niños a casa. No hay problema. Hay total voluntad de mi parte”.

Israel informó que unos 200 ciudadanos fueron secuestrados durante el ataque de Hamas, de los cuales, una docena son menores de edad.

“Lo primero que hay que hacer es intentar conseguir la liberación de los rehenes, de lo contrario no habrá forma de detener la escalada de violencia. Estamos dispuestos a ayudar, incluso yo personalmente”, insistió el cardenal Jerusalén, quien se ofreció por la liberación de los niños israelíes secuestrados, aunque reconoció que hablar con Hamas es complicado.

El cardenal también advirtió que unos mil cristianos se refugiaron en inmuebles de la Iglesia al norte de Gaza, luego de que sus casas fueron destruidas por la ofensiva israelí, y temen reubicarse, pues sería muy riesgoso. Esto podría provocar una crisis humanitaria.

Sacerdotes protegen a los refugiados

De acuerdo con Vatican News minutos antes de que terminara el ultimátum lanzado por el Israel para evacuar el norte de la Franja de Gaza, el Papa Francisco llamó por teléfono al padre Gabriel Romanelli, sacerdote católico que desempeña su ministerio en Gaza, para manifestarle su preocupación, cercanía y oración, y pedirle que no deje de acoger en su parroquia a los refugiados.

El sacerdote Romanelli se encuentra en estos momentos en Belén porque no ha podido llegar a su pequeña comunidad de Gaza. Esta es la cuarta ocasión en que el Pontífice se comunica con él desde que inició la crisis.